Querida Cecilia:
Te escribo hoy para decirte <Gracias>
Hace poco tiempo nos volvimos a encontrar, por casualidad; despertaste una inmensa alegría en mí.
Hoy que tengo que escribir a un maestro que me haya marcado, es que sé que tengo que escribirte; vos, tus clases, son huellas en el registro de mi carácter.
Mi profesora de Ingles, dos veces: en tercer y quinto grado.
Simpatía. Cariño. Alegría. Sonrisa. Firmeza. Carácter. Pasión. Enseñanza. Belleza.
No sé que es lo que aprendí.
Sé que aprendí.
Y voy a seguir aprendiendo del recuerdo.. de tu imágen.
Gracias Cecilia.